El Gancho Infantil ayudando a mover montañas.

Acabamos de recibir el informe de la construcción de las tres escuelas y biblioteca en Kavule, Uganda (totalmente necesarias para que los niños retornaran a las aulas después del Covid). Nos lo manda Sister Lucia, la hermana que veis en la foto liderando a la gente local para preparar el terreno escolar y los caminos que conducen a la escuela, y logrando que estuvieran listos tanto para los niños como para los inspectores del Ministerio de Educación. Nos ha encantado la foto porque si la analizamos podemos ver la esencia de lo que permite que África Directo haga su labor de ayuda a esa contrucción. La receta es:

Una o varias personas dispuestas a dedicar toda su vida a otras personas, a las que más lo necesiten. Esta perfil es de esos que creen que la fe mueve montañas, y  que se encuentre los obstáculos que se encuentre los van a sortean para lograr su empeño. Además, tienen la capacidad de contagiar sus sueños a todos los que se acercan. Su sorda labor suele producirse en lugares sin agua ni luz y en los que la conexión a internet, de haberla, falla más que funciona. A estas personas les trae sin cuidado este punto, su comunicación con su «superior» es espiritual y solo necesitan levantarse un par de horas antes que el resto para informarle y pedirle que les ayude en el camino.

Un donante que sea sensible a la necesidad que se quiere paliar y aporte la parte económica, obviamente uno de los obstáculos más importantes a saltar. De la mano de Marta Baturone llegamos a la Fundación el Gancho Infantil , ellos permitieron hacer realidad este sueño confiando en nuestra labor.

Un voluntario o voluntarios para que también empujen la piedra. En este caso contábamos con Alberto, que hizo el diseño y el seguimiento de la obra. Y con Guille y Agustín, pendientes del resultado final y la capacitación a las hermanas a la hora de justificar los proyectos.

Las personas locales son otro actor muy importante también, ya que si ellas no entienden que deben ser participes en la consecución del objetivo, nada fluirá, y con el tiempo todo se puede ir deteriorando.

A priori no es una receta fácil, pero si le preguntáis a Sister Lucia, os dirá que sí 😉 Y el resultado es este:

!!!!!Un millón de millones de gracias a la Fundación El Gancho Infantil!!!!!

El informe completo del proyecto (incluyendo el original) aquí