INTRODUCCIÓN: El proyecto Uplift nace en 2003 gracias a la iniciativa de Brother Robert, de la gestión de los Hermanos del Sagrado Corazón (Brothers of the Sacred Heart) y el apoyo de África Directo.
Inicialmente, el único propósito del proyecto era el de mantener a los jóvenes ocupados y alejados de la calle. Sobre todo, a aquellos que quedaron huérfanos debido al ejército de la resistencia del señor (ERS). No obstante, el proyecto ha evolucionado a lo largo del tiempo, convirtiéndose en un colegio capaz de ofrecer una estable y gratis educación secundaria.
A través de la educación se pretende dar una nueva oportunidad a los chicos de Luzira, un barrio humilde a las afueras de la capital. Se hace especial hincapié en aquellos chicos más desfavorecidos: huérfanos, jóvenes con familias monoparentales o a aquellos que no se pueden permitir pagar las tasas de un colegio público.
Por ahora, el colegio sólo ofrece el primer bloque de educación secundaria, que se compone de cuatro años de escolarización (equivalente a la E.S.O. en España) y que se termina con un gran examen final. Dichos exámenes se conocen como los “O’level” (Ordinary level). Sin embargo, se sigue financiando la continuación de los estudios (“A’level”) de aquellos alumnos que consiguen una buena puntuación en los exámenes finales.
El colegio también acoge a varias chicas internas, que además de estudiar en el colegio, duermen en él, incluidos fines de semana. De las internas se ocupa una voluntaria local, que duerme con las chicas y se ocupa de su manutención.
INSTALACIONES: Hay un aula por curso. Cada una de ellas esta dotada con una pizarra y pupitres para los alumnos. Aparte de las clases, los alumnos pueden realizar la parte práctica de las asignaturas de ciencia en un laboratorio bien equipado. El colegio también tiene cuartos de baño, una sala de profesores, un despacho para el director, las habitaciones de las internas, algunas salitas pequeñas que hacen las veces de almacenes y por último una pequeña cocina donde los alumnos se preparan diariamente la comida: judías con posho.
ALUMNADO: Por lo general, los alumnos tienen un gran sentido del respeto hacia el profesorado y son totalmente conscientes de que gracias al proyecto tienen una oportunidad que muchos de sus amigos no tienen. En el proyecto estudian un total de 108 alumnos distribuidos a lo largo de los cuatro cursos. A los chicos que sacan buenas notas se les beca para que sigan estudiando. A los buenos estudiantes, se les financia los últimos años de colegio e incluso la universidad. Por lo tanto, es importante que los chicos saquen suficientemente buenas notas como para seguir estudiando.
PROFESORADO: En total hay 23 profesores trabajando en Uplift. Gran parte del profesorado se compone de exalumnos del proyecto, que sienten que deben devolver al colegio lo que el colegio les dio a ellos. Otra parte son profesores licenciados que dan clase cuando terminan de trabajar. Por último, están los Brothers of the Sacred Heart, que además de gestionar el colegio también dan algunas clases.
Pese a que hay licenciados en educación secundaria impartiendo clases en el proyecto, la mayoría de los profesores son voluntarios locales, es decir, no se les paga por dar clase. Hay dos grandes problemas asociados con los voluntarios. El primero es que al ser voluntarios no se les exige ser profesionales de la educación, por lo que algunos de los profesores no son aptos para el puesto. No obstante, es difícil encontrar al profesorado adecuado en estas circunstancias.
INFORMACIÓN ADICIONAL: Uganda_Uplift
AGRADECIMIENTOS: África Directo lleva más de diez años apoyando el proyecto Uplift (escolarización de más de 100 chicos y chicas de secundaria, e internado de varias alumnas) con un importe total este año 2018 de 24.022,15 € financiado en esta ocasión por la Fundación Misaldeas, la Fundación Cafemundi, y una familia española. UN MILLÓN DE GRACIAS A ELLOS POR HACERLO POSIBLE!!!!!!
